Las glándulas están situadas a los dos lados del ano de nuestro perro (como si miráramos un reloj, en la hora 8.20 aproximadamente). Estas glándulas almacenan un líquido que cuando nuestras mascotas defecan, suelen expulsar.
Este liquido desprende un olor característico y es una de las razones por las que nuestros amigos suelen olerse el culo cuando conocen a otros perros. Es su seña de identidad.
¿Cuándo podemos saber si nuestro perro las tiene llenas? Suelen arrastrar el culo contra el suelo constantemente. Para evitar que se formen abscesos o infecciones, es importante mantener un control de estas glándulas, vaciándolas siempre de forma correcta.
A la hora del baño, nosotras revisamos estas glándulas y las vaciamos, si fuera necesario, evitando así que se puedan formar abscesos o infecciones y evitando el mal olor.
